NO darse por vencido es una de las cosas más difíciles
que se puede hacer. Porque rendirse es muy fácil, rendirse es tan simple como
no hacer nada y ya. Pero NO rendirse implica dolor, amargura, quebranto. Es
seguir a pesar de que las cosas no estén saliendo bien, es seguir aun y cuando
todo este en tu contra y no haya más que hacer, es seguir a pesar de la
tristeza y el desánimo, es mantenerse en el camino a pesar de que ya no haya más
fuerzas ni motivos para seguir adelante.
NO rendirse es escuchar una promesa de cambio a
pesar de que no haya certeza de ese cambio. Por eso NO rendirse es más difícil.
Walter @moriuper
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